La gansa de diamante
La gansa de diamante
Había una vez una gansa
en lo alto del cielo en un castillo. Esta gansa era de diamante. Ella no se
movía, era como una estatua. Ella habitaba sola en ese castillo. Todo el pueblo
de San Ricardo sabía que ahí existía esa gansa, por lo que algunas personas se
pusieron a construir escaleras de palo, de quiotes y de paja, pero cuando la
gente se subía, las escaleras se quebraban y se derrumbaban.
En una ocasión, una
señora encargada de un orfanato contó la historia a los niños. Todos lo tomaron
a juego excepto dos. Esos dos planearon llegar hasta la gansa, así que para eso
construyeron una escalera muy fuerte. Primero probaron con palo y quiotes, pero
se quebraba. Luego lo intentaron con paja pero sucedía lo mismo.
Así que un día comenzaron
a experimentar con paja, tierra y agua, logrando construir una escalera muy
fuerte. La construyeron sin dejar de pensar que algún día llegarían hasta el
castillo. Cuando lo lograron ellos fueron los primeros niños en ver a la gansa.
Ellos se volvieron en
los cuidadores de la gansa y para ganar dinero dejaban subir a la gente por su
escalera. Con ello lograron vivir felices por siempre.
Fin
Autor Omar Hernández Pérez
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